jueves, 19 de junio de 2008

Amor por la albiceleste en el exilio

Ahora que estamos en tiempo de Eurocopa, el fútbol copa casi la totalidad de los informativos, los horarios de prime-time y toda la actualidad gira en torno al deporte del balón. Pero lo cierto es que para un inmigrante, sobre todo si es argentino, el sentimiento por el fútbol es el éxtasis llevado a su cúspide. Santi, un tocayo nacido y crecido en Bariloche, está en España por avatares del amor y de su trabajo, pero cada día que Argentina tiene partido él se enfunda la albiceleste y vibra al son de Riquelme, Messi o el Kun Agüero.

La cita de ayer era sobresaliente, de las marcadas en el calendario desde meses antes... Brasil-Argentina. Ninguno de los dos equipos estaba en su mejor momento, ni era un encuentro definitivo, pero los duelos entre la verdeamarella y los sucesores de Maradona no entienden de enfrentamientos menores. Todo se vive al 200%. Santi sufrió durante los 90 minutos, y pese a la hora intempestiva del partido (comenzó a las 02:50 hora española) no dudó en gritar cada ocasión de su selección y de lamentarse por los fallos concedidos por la defensa dirigida desde el banquillo por Alfio Basile.

Lo que más le sorprende a este muchacho criado en las pistas de esquí de Bariloche es la poca pasión con la que se vive en España los encuentros de su selección: "Allá todos nos paramos por ver a la albiceleste, pero en España sos mucho más pausados y menos pasionales". Santi, a sus 34 años, ya es un aficionado más de España desde hace más de un lustro y se une a la legión de seguidores que confían en la victoria de los de Luis Aragonés en la Eurocopa de Austria y Suiza. Ojalá algún día aprendamos a ser todos uno cuando España se juega los cuartos en cualquier torneo.

lunes, 9 de junio de 2008

La mejor compañía posible

Caminando por el centro de Zaragoza te puedes encontrar con bares llenos de encanto. Éstos tienen mucha historia, como es el caso del Linacero Café. De los dueños de la antigua tienda de música situada en la calle San Miguel (ahora se llama Daily Price), se creó un café-bar que se sustenta en su decoración y que además ofrece una bonita gama de bocadillos, tapas y platos combinados.

Al entrar en el Linacero Café, situado en la calle Arquitecto Magdalena 4, bocacalle tanto de la calle San Miguel y Zurita, te encuentras con dos joyas: una chupa de cuero del cantante de Tako, grupo aragonés de Ejea de los Caballeros, y el traje que lució Enrique Bunbury durante su gira de 2002 en la presentación de su trabajo Flamingos. Pero ahí no queda todo, los ojos se deben de multiplicar una vez que accedes a su interior.

Las guitarras de José Antonio Labordeta y de Mauricio Aznar se guardan como oro en paño en su vitrina de cristal. Un mosaico con los vinilos de los grupos más importantes aragoneses, decenas de fotos de cantantes en sus actuaciones en Zaragoza o tres paredes complentamente llenas de posters promocionales de las visitas de grandes nombres a nuestra ciudad. Bob Dylan, The Cure, Depeche Mode, Iggy Pop, Santana, Kiss o The Ramones sirven de papel tapiz para el Linacero Café. Un bar de culto.


Con este post cierro una serie de seis historias con fecha de caducidad con el único fin de entretener un poco a todo aquel que se ha acercado por aquí. Agradecer a los que han perdido parte de su valioso tiempo comentando, o simplemente leyendo, alguno de mis post.

¡Qué les vaya bien bonito!
Santi

lunes, 2 de junio de 2008

Una plaza de Primera

Ya lleva más de un mes abierta desde su inauguración el 28 de abril, pero la Plaza Eduardo Ibarra todavía no tiene esa "afluencia" deseada. Esta plaza situada al lado del Estadio Municipal de La Romareda ha pasado de ser un mero aparcamiento a convertirse en un espacio de ocio para los niños de este barrio situado frente al Hospital Miguel Servet. Ahora goza de casi 400 metros de longitud, con cuatro quioscos (aún no están en uso), casi 500 árboles, tres estanques y un área de juegos infantiles, además de un enorme aparcamiento. Pero la realidad era bien distinta hace unos años...

El percal que se solían encontrar los vecinos de la calle Violante de Hungría con el famoso rastro era demencial: plásticos, miles de colgadores y suciedad a raudales. Si a esto le sumábamos que cada dos semanas el Real Zaragoza disputaba su partido como local en La Romareda, la calle Eduardo Ibarra quedaba como una auténtica pocilga hasta que el lunes por la mañana los servicios de limpieza se ponían manos a la obra. Una imagen bastante deplorable la que se llevaban los aficionados del resto de equipos al ver semejante panorama, además de asistir a un partido de fútbol en tan vetusto estadio. Finalmente, el barrio de La Romareda consiguió quitarse este problema de encima y ahora disfrutan de un entorno magnífico.

Ahora tenemos una plaza de Primera para un campo y un equipo de Segunda. Esperemos que las cosas se igualen en doce meses. Por el bien de la plaza, que necesita más movimiento.

A continuación, un pequeño vídeo de la Plaza Eduardo Ibarra en la actualidad:


lunes, 26 de mayo de 2008

Los pájaros disparando a las escopetas

Mientras Mariano Rajoy intenta reconstruir el Partido Popular mediante una renovación intensa y polémica, los dos grandes valedores de la derecha española han iniciado un proceso de acoso y derribo ante el líder del PP. Pedro J. Ramírez y Federico Jiménez Losantos han pasado de héroes a villanos para el secretario general de la Calle Génova. El cabecilla de la COPE cuestionó a "su" partido tras las salidas de Zaplana, Acebes y San Gil. Por su parte, el director de El Mundo pidió el cese de Rajoy tras los últimos acontecimientos sufridos por los populares. La tercera en discordia de esta pareja es Esperanza Aguirre, la adalid soñada por ambos.

La reacción del gallego no se hizo esperar y cargó contra este nucleo duro sin dar sus nombres. Fue de una manera cobarde, pero al menos se atrevió a "tocar" a la guardia pretoriana de la derecha española. Rajoy está en la cuerda floja tras su mal resultado electoral el pasado marzo y ante el inminente Congreso Nacional del Partido Popular, al que sólo se presenta él.

El último episodio de esta guerra en el pasillo de casa fue la protesta de los ultras del PP en Génova el pasado viernes. Los incondicionales del partido de la gaviota increparon a su líder pidiendo el cese inmediato. Lo cierto es que Pedro J. y Jiménez Losantos han pasado de ser los más firmes defensores de Rajoy de cara a las elecciones del 9 de marzo a cuestionar su capacidad de liderazgo para una nueva intentona por derrocar a Zapatero del sillón de presidente. Los francotirados que atizaban con sus disparos a los socialistas han mutado en pajaritos con muy malos humos que fríen a balazos a su líder venido a menos.

lunes, 19 de mayo de 2008

Engordar para morir

Era difícil creer en la salvación del Real Zaragoza tras lo visto las últimas jornadas ligueras, pero siempre nos entra ese resquicio de esperanza cuando vemos que la meta (muy pobre para el proyecto que se había creado) está al alcance de apenas hora y media de un domingo cualquiera. 90 minutos que se hacen eternos y extremadamente intensos si te estás jugando algo como la permanencia en la categoría reina del fútbol. Lo cierto es que darle tanta importancia a 22 personas dándole patadas a un balón puede parecer algo triste. Les aseguro que con 22 años, y otros tantos apasionado por el club de león rampante. Lo mío no tiene remedio.

Con la tristeza instalada junto a ti en el sofá, lo primero en lo que piensas es en la madre de cada uno de los jugadores, pero las pobres no tienen la culpa de que sus hijos sean amantes del dinero por encima del escudo que defienden. Aunque realmente actúan igual que cualquier trabajador: si tu empresa va mal y sabes que tienes a otras firmas detrás tuyo, ¿por qué llorar? En septiembre ya conocerás a tus nuevos jefes y te presentarán a los compañeros de trabajo para seguir cobrando hasta que la cosa no marche bien o llamen a tu puerta con un fajo de billetes bajo el brazo.

En definitiva, los únicos que sufren este tipo de "taquicardias deportivas" son los aficionados. Ésos que no se venden por el olor del dinero y que seguirán luciendo el escudo del Real Zaragoza pese a que tengan que deambular por campos inhóspitos de Segunda frente a los grandes coliseos. La patata caliente la tiene ahora Agapito Iglesias.

Moraleja: Si realmente lamentan el descenso y sus lloros son de sufrimiento, los jugadores se quedarán, rebajarán sus sueldos y volverán a llevar al equipo a la élite. Lo demás serán lágrimas de cocodrilo.

lunes, 12 de mayo de 2008

Pura bazofia

Empezó siendo una broma, pero con el tiempo se ha convertido en mi peor pesadilla. Allá donde voy él está o emite su chirriante voz para mi desesperación. El personaje del que les hablo es eso, simplemente una creación propiciada para dar publicidad a un producto y una marca. Con el paso del tiempo, el susodicho fue adquiriendo importancia y su rango creció como la espuma. Juegos para móvil; sonitonos, politonos y demás familiares de esta especie; salvapantallas... El archiconocido Chiquilicuatre tuvo su programa de televisión en la ente pública, si esa que pagamos todos para que nos ofrezcan una parrilla suculenta. No ese asqueroso trozo de carne que rezuma de todo menos música (cultura) y gracia (humor). El personaje creado por Buenafuente y su círculo de trabajo no solo es monopolio de los programas de La Sexta, sino que el resto de cadenas también se hacen eco de la fugaz y desafinada carrera del Chiquilicuatre hacia el casposo certamen de Eurovision. La cadena de Emilio Aragón incluso le ha creado un blog para deleite de sus frikiseguidores. Los mismos que consideran a El Canto del Loco los reyes del rock o a Melendi The Boss (el asturiano es el jefe en otras facetas).

El tema Chiki-Chiki, rancio y repetitivo hasta la saciedad, se ha convertido en el hit de moda, y espérate si gana en la reunión de frikis europea, que entonces volverá a tener el tirón del principio y sonará durante todo el verano: tiempo de creaciones infrahumanas para amenizarte mientras te quemas al sol, peleas por clavar tu sombrilla en la playa y tratas de evitar a la suegra o al pesado de tu primo pequeño. No sería raro que si el hijo de Buenafuente sale victorioso consiga hacerse con su propio espacio televisivo. No dudo que La Sexta se lo impida, ya le dieron cabida a Pocholo o al bochornoso programa de Santiago Segura.

Por el bien de la música, o la destilación que el Chiquilicuatre hace de ella, sería un honor poder destruir estos productos sacados de la televisión (Operación Triunfo y derivados) para intentar crear en España una cultura musical, de la que se carece y, encima, no interesa aprender. Andreu Buenafuente, maestro del humor del siglo XXI, osó decir que la persona que no acepta la elección del Chiquilicuatre para Eurovisión es tonta o tiene envidia. Pues sí señor Buenafuente, yo soy muy tonto. Gilipollas profundo, pero el 24 de mayo no me cogerá viendo el tedioso y maratoniano festival europeo. Aunque seguiré admirando su manera de hacer humor y de llevar a un personaje tristísimo a las primeras planas de todos los medios de comunicación.

lunes, 5 de mayo de 2008

La historia más linda del Hereford United

Este fin de semana ha sido noticia este modesto club que milita en la League Two. El sábado, mediante a su victoria a domicilio en el campo del Brentford por 0-3 aseguró su presencia en la League One del próximo curso. La escuadra del oeste de Inglaterra y muy cercana a Gales, solo está a 26 kilómetros, tiene una curiosa historia detrás. Coincidiendo con su ascenso a la League One, el año pasado se quedaron en el playoff de ascenso, queremos rescatar una de las historias más bellas acontecidas en el fútbol inglés. Como no, nuestra efeméride se dio en la FA Cup. El torneo más antiguo del balompié y que cuenta con infinidad de historias que se fraguaron en campos que no ven el sol y que sobreviven gracias al calor de su afición.

El 5 de febrero de 1972 se enfrentaban en el Edgar Street el Hereford United de Southern League (Quinta División) ante el todopoderoso Newcastle de la Premier League. La magnífica historia que ensalzó a este equipo amateur se produjo en la archifamosa Tercera Ronda de la FA Cup, aquella en la que entran en juego los equipos Premier y aportan un plus de energia para los de categoría inferior que tienen la posibilidad de ponerse frente a tantas estrellas. El Hereford tenía que viajar a St. James' Park en lo que parecía una empresa fácil para los urracas, pero que fue el primer paso para una de las historias más bellas del fútbol inglés. El partido fue pospuesto en dos ocasiones por la lluvia, pero finalmente pudo disputarse el 24 de enero de 1972.

El Newcastle, con seis internacionales en sus filas, no consiguió pasar del empate a dos final que daba la posibilidad al Hereford United de disputar el replay en el Edgar Street. A los 17 segundos de partido el Hereford tuvo una falta al borde del área del meta Willie McFaul que Brian Owen no dudó en tirar y puso el 0-1 en un St. James' Park que se quedó mudo nada más empezar. Comenzaba el sueño del Hereford, aunque los supporters de los urracas no tenían ninguna duda en que poco duraría la ventaja de los amateurs. Así fue, en 13 minutos el Newcastle remontó el partido gracias a los tantos de Malcolm MacDonald y John Tudor. MacDonald, conocido como Supermac, fue internacional inglés en 14 ocasiones haciendo seis tantos. Buena prueba del potencial del Newcastle en esta época. Pero Supermac (95 goles en 187 partidos con el Newcastle) y los suyos no pudieron evitar el empate del Hereford por parte del jugador-entrenador Colin Addison tras un disparo de más de 30 metros. El 2-2 campeó al final en el marcador y esto provocaba que se debía ir al replay en el Edgar Street. Como curiosidad decir que Addison entrenó en su etapa en España al Celta de Vigo (86-87), Atlético de Madrid (88-89), Cádiz (89-90) y Badajoz (95-96). Al término del encuentro de St. James' Park, el internacional MacDonald aseguró que no tendría problemas para marcar diez goles al Hereford en el replay y así batir el record vigente hasta ese momento de anotación en un encuentro.


El Edgar Street tuvo que ver como se posponía hasta en tres ocasiones la visita del Newcastle a Hereford, pero la hazaña de ver por televisión (emitido por la BBC) la primera victoria de un equipo amateur ante un equipo Premier no se iba a hacer esperar. El ambiente en Hereford era espectacular: el campo lleno y la gente se las arreglaba para subirse en los árboles y las torres de iluminación para poder sumarse a los 16.100 espectadores que abarrotaban el Edgar Street. El detestado Supermac era una amenaza constante para la defensa local, pero no cuajó su mejor partido y se chocaba una y otra vez con la defensa del Hereford y no podía batir al meta Fred Potter. Pero a falta de ocho minutos para el final del choque, MacDonald recibió un gran pase del mediocentro Viv Busby y mandó el esférico fuera del alcance del meta dejando al Edgar Street mudo.

Los 16.100 aficionados que llenaron el modesto estadio no quisieron despertar de su sueño y poco después tendrían su recompensa. Dos minutos antes del o-1, Addison (que jugó todo el partido) decidió hacer el único cambio permitido y sustituyó al defensa Roger Griffiths por el medio Ricky George (posterior héroe de Hereford). Pero antes, Ronnie Radford hizo el empate en el minuto 85 con un disparo de más de 30 metros que se coló por la escuadra derecha del Newcastle, con lo que forzaba la prórroga en un Edgar Street que era un delirio en favor de sus chicos que estaban poniendo en un aprieto enorme al Newcastle plagado de estrellas. Este gol ha sido considerado como uno de los más bonitos de la historia de la FA Cup, pero todavía quedaba la guinda del tanto de la victoria.


La mítica jugada de Ricky George (en la foto junto a Griffiths) se produjo en el minuto 103, a falta de dos para el descanso de la prórroga, cuando George recibió un pase de Dudley Tyler desde el perfil derecho. El descansado centrocampista controló de espaldas el balón, se dio la vuelta y con la amenaza de dos defensores cruzó el esférico desde fuera del área con un duro disparo al que el meta McFaul no pudo hacer nada y vio atónito como se colaba por la cepa del poste. En ese momento, todo el público invadió el campo, pero no fue hasta que el colegiado Dennis Turner decretó el pitido final cuando la invasión fue definitiva por parte de los 16.100 espectadores del Edgar Street.

La andadura del Hereford United sólo se prolongó una ronda más, cayendo ante el West Ham por 3-1 en el replay en Upton Park después de haber empatado en Hereford a cero contra el equipo Premier. Otra de las curiosidades de esta historia, además de que fue la primera victoria televisada de un amateur sobre una escuadra Premier, fue que en principio este choque no iba a ser emitido porque había dos duelos más interesantes de Cuarta Ronda: el Liverpool-Leeds y el Preston North End-Manchester United, mientras que el Hereford-Newcastle sólo iba a tener un breve resumen de las mejores jugadas. Por casualidades de la vida, el partido fue catalogado como Match of the Day y la victoria épica del Hereford fue votada como el mejor partido acontecido en la FA Cup en el siglo XX. Pero Ricky George, además de lograr este portentoso gol, también fue noticia en 1998 al ser el propietario de Earth Summit, el caballo que ganó el Grand National. Sin duda un tipo peculiar y con mucha suerte.